Cuenta la
leyenda, que cuando aún estaba en el vientre de su madre, ésta le
recitaba cánticos védicos. Un día, su padre, con ánimo de impresionar al
sabio Rey Janaka cometió ocho errores en su pronunciación y Astavakra se
estremeció ocho veces. Astavakra nació así con ocho deformidades en su cuerpo
pero siendo muy sabio, consiguió trascender sus limitaciones y llegó a
convertirse en maestro del Rey Janaka. La postura honra así al sabio de manera
que con nuestro propio cuerpo retorcido conseguimos levantarnos del suelo.
Sus enseñanzas se hallan compiladas en el Astavakra Gita, un texto fundamental del Advaita Vedanta. Se dice que cuando el maestro iluminado, Astavakra llegó a la corte de Janaka, sucedió "la conversación más extraordinaria que ha tenido lugar en este planeta".
La palabra “Astavakrasana” viene del sánscrito Ashta: Ocho; Vakra: Torcido, curvado o doblado; Asana: Postura.
Sus enseñanzas se hallan compiladas en el Astavakra Gita, un texto fundamental del Advaita Vedanta. Se dice que cuando el maestro iluminado, Astavakra llegó a la corte de Janaka, sucedió "la conversación más extraordinaria que ha tenido lugar en este planeta".
La palabra “Astavakrasana” viene del sánscrito Ashta: Ocho; Vakra: Torcido, curvado o doblado; Asana: Postura.
BENEFICIOS:
- Fortalece brazos, muñecas y abdomen.
- Cultiva la paciencia y perseverancia.
- Trabaja balance y concentración.
CONTRAINDICACIONES: Evitar esta postura si presenta lesiones en muñecas, codos ó en hombros.
MODIFICACIONES: Utiliza blocks para elevarte, apoyando las manos en ellos con fuerza.
RECUERDA:
- Apoyar bien las palmas de las manos.
- Tratar de llevar la rodilla elevada lo más alto que puedas sobre el brazo.
- Llevar hacia el frente el torso, quedando paralelo al piso.
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